Permitidme que use esta plataforma para expresar ciertos detalles que aunque no tengan que ver directamente con el fín de este proyecto, sí lo hace de forma indirecta y nos afecta a todos de una u otra forma.
Se trata de nuestra arma o herramienta favorita y más usada para compartir nuestros documentos, una labor que en los orígenes de este proyecto era extremadamente complicada, cuasi titánica y que con el paso del tiempo y con la ayuda de las nuevas tecnologías emergentes y en concreto nuestro afamado y en principio aliado FACEBOOK, se hizo más llevadera en incluso fácil, si cabe:
Ya no tengo que contactar personalmente con nadie para pedirle las fotos, vídeos o textos para digitalizarlos y colgarlos y posteriormente devolverselos a sus dueños, cosa que hacía de buen grado pero con el consiguiente desgaste personal de tiempo y estrés, incluso metiéndome en problemas, ya que con cierta mala fortuna y desacierto, se llegaron a perder algunas fotos prestadas por un desinteresado colaborador al cual le deberé eternamente una explicación, de no ser que vuelva a encontrar sus memorables fotografías. Lo siento, de veras.
Ahora todos sabéis cómo hacerlo, y colgais vuestras fotos , vídeos y recuerdos y gracias al grupo que creé en facebook, todos estamos en contacto y disfrutamos de todo ello, sin que yo tenga que intervenir personalmente, casi.
Por lo cual, creo que debería estar contento y dedicarme a disfrutar de una vez por todas de que esto sea así, relajarme y comprobar que, ahora sí, este proyecto de documentación historiográfica FUNCIONA, por sí solo.
Respecto a los textos que aparecen en los muros de todos cada vez con más virulencia pidiendo «privacidad o te borro», tengo algo que decir.
Vaya paranoia general que habéis pillado, queridos amigos!
Estos no son sino los síntomas de que el fín de facebook no sólo está cerca, es su fin tal y como estaba pensado y que conste que fue creado precisamente con el propósito de relacionarnos socialmente en la red de redes, haciendo públicos nuestros datos y documentos personales CON NUESTRO CONSENTIMIENTO.
Así, desde el mismo momento en que le dimos a aceptar al crear nuestra flamante cuenta, dejamos de ser privados y cedimos nuestra información personal para pasar a ser de dominio público global ( D.P.G).
Por lo cual, ya no hay nada que hacer al respecto, aunque pataleéis y protestéis, incluso cerrando vuestra cuenta, tus datos ya están en su poder y son y serán utilizados con fines comerciales, ya que esa es la forma que tiene facebook de obtener beneficios, aunque en su página de bienvenida leas » es gratis y lo seguirá siendo», como toda aplicación o negocio, si pagas premium, podrás hacer publicidad de tu empresa más efectivamente y obtener beneficios a cambio de beneficios del host, en este caso facebook.
Así que, dejar de escribir textos virales, copiados y pegados de otros muros pidiendo privacidad-o- te- borro, aunque eso sí, cada uno puede determinar en cierto grado, qué deja ver y qué no en su configuración personal de privacidad de la cuenta.
Para terminar con toda esta calamidad de desastre-social-consentido, yo he abierto una nueva cuenta, que de momento mantengo en secreto absoluto y a modo de experimento, dejaré mi primera cuenta abierta para comprobar personalmente la aseveración de que facebook tiene los días contados.
Bueno, vamos a dejarnos de pegos (me encanta esta palabra) con la privacidad de facebook! No haber entrado en el juego! Ahora es demasiado tarde para arrepentirse, por lo que, a disfrutar del «caralibro» porque le queda poco, ¿ o es que no lo veis?
La vida es corta y facebook murió hace tiempo.
Corta vida a Facebook!